Que nazca en mí lo que soy

Meditación con Mataji Shaktiananda

03·04·2024

¿Sabes lo que viene bien de vez en cuando?
Que creas nacer, que es como si estuvieras
recién naciendo.
Así que respira imaginándote lo que quieras.
No tendrías que estar
necesariamente en vientre alguno.
¿Quién sabe criatura,
cuantas veces has nacido y dónde?
¿Desde qué circuito? ¿En qué sistema?
¿De qué forma?

Así que no te limites,
hazte un espacio e instálate ahí,
con un respiro tenue, que lo sientas alimento.
Y date todo tu tiempo para respirar,
es ahí donde y cuando el tiempo existe.
Hazle espacio al respiro
y que el respiro te haga espacio.

No te figures en cuerpo ni resientas densidad,
respira simple y olvida todo,
no te acuerdes de nada ni nadie,
ni siquiera de ti.

Deposita respiro en el éter
y haz que el éter se introduzca en ti.
Respira constante, haz que sea lo único que existe,
tu respiro, tu respiro primero,
aunque exista lo que exista,
es tu respiro primero.

No averigues dónde estás ni quién eres,
ni falta hace, ni permitas que ningún pensamiento
te detenga ésta, tu gestación.
Ni que tampoco la facilite,
 toma tu tiempo, respira tu tiempo,
justo para que el tiempo no sea.

Hasta los pensamientos
hacen el tiempo que no es.
Y el respiro hace que cesen.
Y respiras y respiras y respiras, criatura.

Créete que no existe nada ni nadie,
que lo que existe es donde estás
y, donde estás, es lo que es y nada más.

Permítete permanecer en esa sensación,
en sutil cesación.
Ni crees ni recrees nada, todavía no.
Solo respiro.

Si algo quieres sentir, que sea solo tu respiro.
Y que tu respiro te sienta.
Y que te hagas.
Y que te crees.
Y que te creas.
Y que aparezcas.
Y que te veas.
Y que te escuches.
Y que nazcas hoy en ti, tal y como quieres.
¿Quieres?

Entonces estás, eres y respiras por ti y para ti.
Y percibes todo esto y todo esto te percibe a ti.
¿Y quién, -así como eres y estás,
recien naciendo- eres hoy?
¿Quién quieres?
¿Te imaginas esa oportunidad?
¿Crees que existe?
¿La harías posible? ¿O no?

No dejes el respiro a las fuerzas inconscientes
que respiran en tu Ser.
No lo permitas, porque estarías renaciendo mal,
atrapado de nuevo, revestido de nuevo,
en lo que crees ser, y no en lo que eres.
¿Qué crees hace que creas? Lo que no eres.

Y es tanto lo que has hecho,
es tanto lo que te has perdido.
Es tanto lo que has zucumbido,
por esa involuntad, por esa falsedad,
por esa inconsistencia que permitiste ya.
Respira para que no insista,
es tan fácil y factible que lo haga,
es casi Ley, es Ley,
si en ti no existe afianzamiento
hacia la verdad que eres.

Respira pronunciando internamente,
respirando profundo y pidiendo asistencia:

Soy la criatura que cada vez que quiere, Es.
Soy la criatura que cada vez que quiere, Es.
Soy la criatura que Es.
Siempre y cuando pueda dejar de ser
lo que no es.
Si quebré principio, si quebré Ley,
si me acoso, si me miento, si me escondo,
¿cómo puedo ser? ¿Qué puedo ser?
¿Quién puedo ser?

Y el respiro te acompaña,
el respiro aliento,
de lo que es posible nazca hoy en ti,
y que hagas que muera quien no.
Y hasta serías capaz de hacer un cruce:
que viva quien Es y que muera quien no.
Si supieras criatura, lo que es capaz de nacer
y lo que se niega a morir.
¡Si supieras!

Por eso, haz una petición
por lo que debe nacer:
 Que nazca en mí lo que soy.
Que nazca en mí lo que soy.
Que nazca en mí lo que soy.

Jamás temas morir, jamás.

Respira consiguiendo vivir hoy aquí,
en ti, como eres, no hay más.
Hasta que puedas y quieras,
lo que hablamos, lo que has sentido,
lo que has pedido.

Es tiempo de dejarnos criatura.
Ámate más, sé firme en tu Ser,
sé más consciente, sé más prudente,
sé más leal, sé más.

Om Namaha Shivaya