Celebrar lo que esta vida es

Meditación con Mataji Shaktiananda

18·09·2024

Alcanza a mantener una respiración
firme y consciente,
haciendo respiraciones sosegadas,
 espaciadas, tranquilas,
hasta que mantengas un ritmo propio, calmado,
que te permita sentirte bien.

Que cada respiro te diga algo,
que puedas percibir lo que contienes
y que eso que te diga tu respiro,
sea tan tuyo, tan propio, tan íntimo,
que puedas considerar que todo te lo dices tú, a ti,
desde ese estado en el que te encuentras,
en el que te asistes, te escuchas y te propones.

Haz que cada respiro poco a poco
se vaya silenciando también,
y estando ahí, sientas aún más seguridad,
confianza, asistencia.
Que si algo quieres, algo piensas,
algo crees necesitar sea saber estar así,
contigo, en tranquilidad, con firmeza.

¿Cómo asimilas cada pausa, cada espacio?
en que, sabiendo que estás ahí,
nada necesitas, si apenas, respirar.
Que ya puedes producir una forma consciente
de atenderte así, de hurgarte sanamente,
de experimentarte, de darte en valioso encuentro
y lo más, y lo más: expandirte.
Hacer que todo lo que eres, esté consciente,
habitable, y que sepas y puedas correlacionarte
con todo lo que existe,
desde lo que sabes eres hoy.

Miles de kilómetros de distancia
crees que nos separan hoy.
¿Lo crees?
Te digo algo: todo esto ha sido preparado,
pensado, planeado, para que podamos
desde cualquier instancia, distancia,
acercarnos como es, habiendo unificado
nuestras almas en un sano y justo compromiso
y encuentro de amor.
Lo habíamos esperado y se cumplió.

De ahí que este momento,
en el que nos percibimos así,
solo exista lo que Es, en lo que somos.
Y sé que sabes lo que Es, eso que Es.
Es lo que nos ha dado y ha producido esto,
y estamos ahí, orbitando en una Esfera,
tan consciente, tan elaborada, tan resguardada,
y lo hemos hecho, es nuestro gran logro.
Mira dónde estás y mira dónde estoy.
Es como si existiéramos uno en el otro,
siendo lo que Es.

Por eso puedo decirte hoy desde aquí,
desde donde estoy: gracias.
Nunca hubo otra vida
en la que hubiese tanta verdad,
inmediata y cercana.
Y por supuesto que es
por los tiempos, por las formas nuevas,
por todo lo que hoy nos permite
establecer esta comunicación,
esta conexión, este vínculo, esta proyección,
este alimento, esta posibilidad, esta fuerza,
que nos hace mirarnos desde adentro, y estar ahí.

Y estamos ahí, siendo lo que somos,
y respiramos sabiendo eso, sintiendo eso,
correspondiendo a eso, así como proyectando eso.

Valora tu respiro,
entiende ¿cómo es?, ¿qué estás ejecutando?,
¿qué forma de tu verdad?, ¿por qué este momento?

Respiras, respiro y respiramos,
y nada se ha detenido,
menos el tiempo que Es,
el que llevo, el que llevas,
el que nos lleva hacia donde Es,
y lo sabes bien,
aunque estoy donde pareciera que el tiempo
ni siquiera ha sido, sí lo es, en ti, en mí.
¿Y sabes qué?
Celebro contigo. Eso haré.
Celebraré siempre lo que esta vida es,
por ti, por mí, por lo que Es.

Gracias por permitírmelo.
Gracias por ser.

Respiramos ahora, reconócete,
sitúate y desde aquí,
te digo como siempre:
amor, amor y más amor, siempre.

Om Namaha Shivaya