Abrir el alma de par en par y que nadie la toque. Inmutabilidad es la respuesta que queda cuando ya se manifiesta sin reparos, sin escondrijos ni vacíos. Logro de plenitud y descanso. Eso llega. Llega al alma y la toca.

Abrimos con el Jayanti de Yogananda y fue descubrirlo como siempre, serenamente revelador, abrigo de luz en medio de tantas sombras agazapadas en su descontento. Nos dijo: “Y puede que este templo también esté en el patio de una casa, pero no es de nadie, es del Ser. Del Ser que se sabe libre, del Ser que se reconoció, del Ser que se liberó. No estoy, nunca estuve para divisiones. Jamás compartiré la burla. Confíen. Jamás dejen de hacerlo. Confíen. Gracias por confiar en mí. Señor Shiva, ya estoy listo. Soy más libre.”

Y eso hemos hecho siempre, es parte de nuestra realidad de entrega. ¿Cómo sentirse entonces si éstas fueron las palabras para abrir el año? ¿Cómo no abrir el alma tocada por tanta bendición?

Mataji Shaktiananda