¿Dónde está el cielo?

MEDITACIÓN CON SRI MATAJI SHAKTIANANDA

26 de Julio de 2017

Mantente respirando en tu tono, ése que te vibra internamente. Ese que te dice quién eres y que te contiene tanto como tú lo contienes. Recuerda que estás respirando para meditar. Y no es que se trate de una respiración especial, al contrario. Es esa tu forma tan propia, la única que te puede conducir hasta ti.

¿Te has preguntado, si sabes, si conoces cómo respiras? ¿Qué tan consciente lo haces? Lo hermosamente vital. Mantente ahí, en tu sutil respiro que te conecta, que te introduce. Extasíate, disfruta tu quietud, esa serenidad que alcanzas. Y lo más importante, la facilidad, la capacidad que has adquirido de aquietar tu mente. Cómo se ha ajustado, se ha acomodado a ti, sabiendo bien lo que buscas. Sabe, que en cierta forma la buscas también a ella, sabiéndola presente. Sabiendo que se pronuncia, y que en cierta forma también se activa.

Es la que programa este momento. ¿Sientes cómo se hace sentir? Haz que se complazca en este ajuste. Si es ahí, desde ahí, que se programa todo. Cada neurona asiste y se irrigan los filamentos. No los llames control, llámalo amor. Díselo.

Que el oxígeno que las crea y las recrea, esté impregnado de tu amor.¿Cómo lo sabrías? No te bastaría tan sólo con decirlo, tienes que sentirlo.También pudieras preguntarte: ¿Cómo lo siento, cómo lo propicio, cómo lo produzco?

Por lo pronto, creyendo, sintiendo, éste tu acto de amor. ¿O cómo lo llamarías? ¿Quién te obliga? Tendrías que aceptar que estás haciendo un acto de amor por ti. Simple. Que te valga ante tus reclamos, ante tus lloriqueos, tu ansiedad, tu negación y tus otros momentos, tal vez insanos.

Valida este momento. ¿Crees estar ganando algo? ¿Crees estar acercándote a algo? ¿Al cielo, quizá? ¿Cuál? ¿Crees que existe un cielo? ¿Dónde? Y si te dijera que hasta el cielo te habita, siendo quien eres, una fracción del espacio-tiempo.

Y si creyeras que estás ahí, habitándolo, ¿podrías, te sentirías, lo creerías? ¿Dónde está el cielo? ¿Dónde queda? O aún te confundes creyendo que es esa visual, mezcla de gases y de éter confuso. ¿Crees que algo o alguien ha reservado un espacio para todos nosotros? ¿Dónde? Y te diría que sí, en Su Conciencia. Es eso lo que hemos llamado cielo.

¿Esto qué sería? Donde vivimos hoy, ¿no sería acaso Su Conciencia también? Por eso valida el momento, obtén lo que Es, gana en conciencia.

Padre, permíteme habitar en Tu Conciencia.

En la que el amor Es, mi amor.

Acepta este pequeño esfuerzo por estar ahí, en ti, en mí.

Comprime pensamiento, comprime respiro, alcanza el vacío. Suspende el respiro, extasíate.

Tu mente te lo agradecerá. Es ahí donde también quiere estar, donde ya no es. Suspéndete.

Poco a poco, dale a tu respiro profundidad. De a pequeños esfuerzos llegarás a grandes. Cada vez ganarás más espacio en menos tiempo.

Respira profundo, atendiendo el momento, tu aquí y ahora. Aceptando tu vida, a todo y a todos los que te rodean. Confírmate tu presencia, respira profundo.