OFRÉCETE SIEMPRE UNA NUEVA OPORTUNIDAD
15 de Enero de 2016
Un comienzo, ¿de qué? Un comienzo, ¿cuál?
Cualquiera. Porque también podría ser un recomenzar.
Siempre tendrías que darte más y nuevas oportunidades, en principio a ti.
Y en función a las que podrías darte,
también podrías dárselas a alguien más o a algo más.
Dentro de lo que puede ser tu desespero, tu angustia, esa impaciencia,
vas agotando una a una cada oportunidad, que brota tan confiadamente de ti,
porque desde alguna parte, surgen de tu confianza en ti.
¿No te parece hermoso?
Y dime cuando ves, sientes,
que te vas venciendo,
que vas ganando.
Es ahí cuando deberías rescatar tanto,
reservar tanto,
para cuando no te sientas tan en confianza.
Y te valdría entonces revisar,
mantener eso que contienes ahí.
¿Qué contienes ahí? ¿Qué crees contienes ahí?
La más grande de las oportunidades: vivir.
Créeme que es así.
Y te preguntarás algunas, muchas veces,
¿para qué, para quién, por qué?
Y aunque creas que no,
cada día deberías cuestionarte la vida.
Cuestionártela. ¿Entiendes lo que es eso?
Porque se trata de una cuestión, una valiosísima cuestión.
Lo que tendrías que ver es desde dónde te la cuestionas.
Y ya sabes, ¿desde el amor o desde el temor?
¿Desde dónde? ¿Qué dices?
Me preguntaras, ¿es que acaso el amor se cuestiona? Aquí sí, aquí sí, aquí sí.
Por lo que entonces, deberías apelar a lo que tu confianza es en ti,
a lo que tu amor es en ti. Y ante eso, cualquier cosa es incuestionable.
Así que sigue cuestionándote.
Ya lo sabes, es desde el amor, hasta que, alguna vez,
ya no exista cuestión alguna que te refute tu principio de amor.
Mataji Shaktiananda
0 comentarios