¿CÓMO ADMINSTRAS TU ESPIRITUALIDAD?
13 de Marzo de 2015
¿Cómo administras todo esto dentro de ti? ¿Qué te representa, una ganancia o una pérdida?
¿Qué crees te genera un ritual, una vuelta a tu mala, una que otra oración en forma de rezo?
¿Cómo concibes tu propia introspección? ¿Qué crees encuentras?, o por el contrario
¿crees estar perdiendo el tiempo? ¿Desde qué lugar, parte, crees se genera todo esto?
¿Si alguien lo inventó, lo creo, lo reinventó? ¿Crees que perteneces a un consorcio espiritual?
¿Cómo se financiaría?
Por eso te digo,
¿de qué manera administras todo esto dentro de ti?
¿Qué concibes como ganancia o como pérdida?
¿Crees que dentro, por detrás o por encima de esto existe algún lucro?
Y respóndete en tu silencio, el que guardas.
No podría ser de otra forma.
Estamos tan comprometidos, tan abiertos a Ser,
tan cercanos a nosotros mismos.
Y por otro lado, tan ingenuamente dispuestos
a concebir una realidad que para muchos,
ha resultado su pesadilla, cuando en realidad,
lo que siempre ha sido es un sueño.
Soñar aquí en este planeta, sin párpados.
Porque hay quien cree tenerlos y además cerrados. Eso creo. No se nos permite.
Y ha sido el más profundo sueño, siendo un sueño, y siendo también un despertar,
una aventura que se ha concebido, y escúchalo bien: por Gracia Divina.
¿Sabrás lo que la Gracia es? ¿Y cómo no?
Si es lo que vivimos y experimentamos todos juntos en diferentes momentos y formas.
Y también podrías haberlo entendido como una bendición,
en medio de todo lo maldito que somos.
Y a saber, nada bastó, ¡nada!.
Ni conocer, ni reconocer,
ni ansiar, ni obtener, ni tampoco amar.
Corrijo, sentirse amado, que es distinto.
Hay veces que quien es amado, no sabe amar.
Y tan sólo eso, atreverse a sentirse amado, asusta.
Casi que como experiencia nueva.
.
Y se empieza a generar una forma de asimilar eso,
casi que como una pérdida,
no sabiendo que ganancia es, absoluta.
Justo ayer, cuando debí –porque es deber-
ajustar las mismas formas de Luz
en las que estamos dispuestos,
te confieso que sentí muy internamente
mi más profundo error: mi exceso de confianza.
Y me dirás, ¿dónde estuvo? ¿desde dónde se produjo?,
ante tu cualidad, ¿cómo ha sido posible? Fue.
¿Y sabes por qué lo reconozco? Porque ante esto,
lo único que quiero es la ganancia íntegra de lo que Es.
Si me preguntas, quiero ganarlo todo. Y sé que no te sorprenderías ya,
ante lo que fue tu propio fraude.
Cuando se ama, también se busca ganar al otro.
No para mí, porque ya te tengo, sino para ti.
Por eso es que ni siquiera asumo pérdidas.
Estoy y soy bendita en mi Amor. Ya me lo gané.
Eso es.
Mataji Shaktiananda
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