GURÚ PURNIMA
12 de Julio de 2014
Recibir tanto sólo por amarte, no pareciera ser justo. Solo por Amar.
Pero, sabes qué pasa, que cuando el amar resulta una acción, una acción por muchos desconocida,
y sabes también qué pasa, que son tan pocos los que se permiten ser amados, totalmente amados.
Pero, sabes qué pasa, que cuando el amar resulta una acción, una acción por muchos desconocida,
y sabes también qué pasa, que son tan pocos los que se permiten ser amados, totalmente amados.
El logro aquí no es saber Amar,
es aceptar sentirse Amado y,
después de eso,
aceptar Amar.
Cuando creo haber decidido
sentirme amada
no creas que resultó algo fácil,
mas cuando ese amor cubría tanta exigencia,
tanto rigor, tanta disciplina.
es aceptar sentirse Amado y,
después de eso,
aceptar Amar.
Cuando creo haber decidido
sentirme amada
no creas que resultó algo fácil,
mas cuando ese amor cubría tanta exigencia,
tanto rigor, tanta disciplina.
Es como si después se perdiera toda intención
al entender que sólo se debe responder
sabiéndose amado, sintiéndose amado,
queriéndose amar.
Y tanto después viene lo otro.
Y si me permites que te cuente,
es lo más maravilloso, es no reparar
en lo que como sentimiento entiendes.
Es más, tampoco es pronunciar.
al entender que sólo se debe responder
sabiéndose amado, sintiéndose amado,
queriéndose amar.
Y tanto después viene lo otro.
Y si me permites que te cuente,
es lo más maravilloso, es no reparar
en lo que como sentimiento entiendes.
Es más, tampoco es pronunciar.
Quedaría sólo decirte que es más que hacer.
Amar es esa comunión con todo Principio, es quebrar toda condena,
es saber que necesitas refugio en medio de todo esto y creer que existe.
Es no querer alimentarte más de nada visible.
Amar es esa comunión con todo Principio, es quebrar toda condena,
es saber que necesitas refugio en medio de todo esto y creer que existe.
Es no querer alimentarte más de nada visible.
Mi comunión con este Avatar fue tan sutil, casi que tan inesperada.
Y es que a veces jugamos con nosotros mismos y, para contrariarnos,
no esperamos, cuando la espera realmente existe.
Y entonces vino, se anunció, y empezó la maravilla, la más fantástica maravilla.
Lo indecible, lo impronunciable. No podría decirte que lo desconocido. Es absolutamente propio.
Mi Guru, si así lo quisieras, es tu Guru, y ni te lo presto, ni te lo regalo, ni te lo brindo.
Te lo doy. Te lo doy. Te lo doy.
Y me preguntarás: ¿A petición de quién? De ti mismo.
Mi espera también es tu espera.
Haz refugio en Él, siendo en ti. Siendo.
Estamos tan benditos que sería injusto que no sepas recibir lo que te doy,
que no es de mí, es de ti. Es así.
Om Namaha Shivaya
Mataji Shaktiananda
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