ERES EL SER
11 de Mayo de 2012
No dejes de respirar.
Acuérdate que cuando nos juntamos así, somos un solo aliento,
aunque el tuyo lo mantengas ahí, íntimamente.
Y cuando te digo: no dejes de respirar,
te hablo de que lo hagas conscientemente.
Es tiempo que nos miremos profundamente,
que ya no nos evitemos.
Y puedes intuir, detectar, sentir, tu propia resistencia.
Eso que a veces ocurre que no te provoca ni te dan ganas de sentir más,
que como estás te sientes bien.
Eso es lo que crees porque no sabes lo que es sentirse mejor,
estar realmente bien, en Paz.
A veces en este mundo se restan tanto las fuerzas.
Hay tanta desolación, poco interés, formas de falso contacto. Y eso aturde.
Y no es cuestión que nos aislemos y dejemos de establecer
relaciones, contactos, estímulos.
Necesitamos crear fuerzas. Crear fuerzas,
es decir, que tal vez aún no existen.
Y eso que jamás te desaliente.
Por el contrario, tienes que sentir todo eso que eres, sentirte capaz,
en disposición y en agrado; reconfigurar tu fórmula, la que realmente eres,
para que puedas producir lo que necesitas, lo que quieres, incluso lo que debes.
Existen movimientos, fuerzas unidas, fraternidades, asociaciones, conjuntos.
¿Qué no hemos inventado para unificar un poco algún intento de algo?
Y no siempre resulta porque termina siendo difícil establecer acuerdos.
Es por eso que lo que mayormente persiste son lo que has visto
como las religiones o las formas espirituales.
Aunque haya muchas distintas,
se dan ante una fórmula común: Creer en el Dios.
Y pareciera ser lo más seguro que tenemos.
O más bien, lo más seguro que somos.
Y ya.
Por esa razón puede que alguien resienta.
Hay religiones que no creen que somos Dios,
aunque ese saber está dado.
Es por lo que te digo, que desde donde estamos,
quienes somos y lo que queremos debemos crear una fuerza única,
interna, para sostener la verdad única: Eres el Ser.
Y no te crees más porque no has sabido, no has querido,
no has podido juntarte con aquellos que sí creen en eso y
que saben que muchos dioses juntos hacen al Dios.
Y perdona que te nombre así, sabes que no es mi forma.
Incluso no es totalmente de mi agrado tomar esa palabra,
tan desacralizada, tan banalizada, tan mal ejecutada.
Entiende bien, cuando hablo de dioses es porque te nombro con Amor y respeto,
con confianza y Fe.
Om Namaha Shivaya
Mataji Shaktiananda
0 comentarios